Yves Saint Laurent nació en Orán en 1936, donde pasó toda su juventud. Llegó a París en 1955 para inscribirse en la escuela de la Cámara sindical de la alta costura. Fue contratado muy pronto por Christian Dior, de quien tomó su lugar a la muerte de éste en 1957 a la edad de 21 años.
Despedido tres años más tarde, funda su propia casa de costura Yves Saint Laurent a principios de los años 1960 gracias al apoyo financiero de su compañero Pierre Bergé.
Es a partir de este período que sus creaciones revolucionarán los guardarropas. Estas no son sólo trajes de alta costura,sino que van a imponerse poco a poco en los armarios de la todo el mundo. Entre estas creaciones de éxito, la primera es sin duda la chaqueta de marinero oversize (Caban).
Originalmente, esta prenda de lana es utilizada por los marineros para protegerse del frío. Yves Saint Laurent hace de este abrigo no ajustado un hábito ideal para las mujeres que no se atreven aún a descubrir sus caderas usando pantalones.
El mismo año, Yves Saint Laurent reinventa también el trench-coat: volviendo femenino este abrigo usado por los oficiales ingleses durante la Primera Guerra Mundial, con cuyas mangas cosidas al cuello y el cinturón largo, hacen destacar el tamaño femenino.
En 1965, el diseñador presenta seis vestidos de alta costura para la colección otoño-invierno, inspirados directamente en los lienzos de Piet Mondrian. Aficionado al arte, Yves Saint Laurent va, en numerosas ocasiones, a dejar traslucir su admiración por los artistas a través de sus creaciones. Con este vestido de punto fino, sin ninguna costura, el modisto reproduce las líneas geométricas de Mondrian.
Al año siguiente, en efecto, rinde homenaje al arte pop creando dos vestidos homenajes a Tom Wesselmann.
Desde los años 70 hasta los años 80, el diseñador de moda crea prendas en homenaje a Picasso, Matisse, Cocteau, Van Gogh, Apollinaire o incluso Braque.
En 1966, en la continuidad de su estilo masculino-femenino, Yves Saint Laurent transforma el esmoquin adaptando sus códigos al cuerpo de la mujer. Anticipa la revolución femenina que sacudirá a la sociedad e insta a la mujer a modernizarse, a emanciparse. " El esmoquin es una prenda de estilo y no de moda. Las modas pasan, el estilo es eterno", afirma el gran modisto.
El diseñador de moda honra el precepto de la belleza del cuerpo desnudo de la mujer desde 1966, poniendo al descubierto el busto de las mujeres con la ayuda de un material sintético semitransparente, la Cigalina.
Con la Sahariana, en 1967, Yves Saint Laurent se reapropia una vez más una prenda masculina, en la continuidad del estilo que hizo su éxito. La creación toma esta vez el estilo militar: esta chaqueta de tela de algodón o de lino, de cuatro bolsillos, era usada por el ejército británico en la India o por los miembros del Afrikakorps y las divisiones alemanas de panzers, en los desiertos de Libia y de Egipto.
En 1968, YSL dibujó el traje-pantalón, o "Jumpsuit". Este uniforme entonces usado por los aviadores es originalmente el hábito de trabajo de los obreros.
En 1977, lanza el perfume Opium en colaboración con los perfumistas Jean Amic y Jean-Louis Sieuzac de Roure. En sus notas más elevadas predominan las mezclas de frutas y especias, con naranja, mandarina, ciruela, cilantro y aldehídos. En sus notas de corazón, predominan ylang-ylang, clavo, canela, jazmín y rosa. En sus notas de fondo destacan pachulí, benjuí, labdanum, mirra, opopanax y vainilla.
Opium es un perfume que marca un hito en la historia de la perfumería, ya que, además de su éxito comercial, fue el perfume el que lanzó de alguna manera la era de la comercialización en el campo del perfume. En efecto, Yves Saint-Laurent eligió un nombre fuerte, (refiriéndose a la droga y a la adicción, lo que escandalizó mucho para la época), una musa famosa, y convocó a toda la élite hollywoodiense para una gran noche de lanzamiento.
El frasco original fue confiado a Pierre Dinand, que propuso la bellísima idea de un inrô, caja con compartimentos, llevada a la cintura en el Japón antiguo, para contener hierbas medicinales, y se realizó en laca roja. Es también uno de los primeros perfumes destinados ciertamente a las francesas, pero también a las americanas. Fue una revolución en el mundo de la perfumería. Se convirtió entonces en el líder de los orientales, seguido, algunos años más tarde, por Coco, de Chanel.
YSL soñaba con un perfume de Oriente que evocara flores de fuego, explosiones de amarillo, rojo y azul.
El 7 de enero de 2002, YSL decide poner fin a su carrera e invierte en la Fundación Pierre Bergé - Yves Saint Laurent que conserva 5.000 prendas y 15.000 accesorios. Esta Fundación se convertirá en el Museo Yves Saint Laurent a partir del 3 de octubre de 2017.
Yves Saint Laurent muere el 1 de junio de 2008 a causa de un cáncer.
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